De los buenos recuerdos que tengo de mi infancia, uno de ellos es el estar comiendo galletas de una lata. Llegaba diciembre y no podía faltar esas galletas, ya sea porque se compraban o porque se recibía un regalo, porque de verdad es que esas galletas son perfectas para obsequiar. En mi casa hay diferentes latas de galletas, que luego se convirtieron en ese lugar favorito para guardar hilos y cosas de costuras jajaja.
Abrir una lata de galletas es emocionante, lo malo es que se acaban muy rápido. Aprender a preparar estas galletas era de una de esas cosas que tenía pendiente en mi lista de recetas por dominar y luego de practicar unas cuentas veces, hoy quiero compartir contigo la receta y algunos consejos que te pueden ayudar a preparar unas excelentes galletas danesas. La historia es interesante, principalmente porque eran un lujo en épocas antiguas y hoy es algo normal y si te preguntas porque vienen en una lata es porque en aquella época, se descubrió que se conservaban mejor de esa forma.
Hay una gran ventaja en prepararlas y es que podemos darle el sabor que se desee. Se pueden hacer de naranja o limón, de vainilla, chocolate, canela, jengibre o cualquier especie que se desee. Todo depende el gusto de cada persona, pero es una gran ventaja poder adaptarla a los gustos personales y hacerlas de las forma más nos guste, incluso en forma de letras.
A mi particularmente me encanta dorar en exceso las galletas y la ventaja que tiene esta receta es que las galletas no se ponen duras si se pasan un poco de cocción. Adicional siempre me parece que ese color dorador/marrón se ve muy bonito y es cosa también de mi madre, que me cultivó esa cultura de no comer cosas preparadas con harina que estén blancas. Sin embargo, en el paso a paso, te doy algunos tips en cuanto a la cocción.
Para preparar las galletas danesas, estos son los ingredientes que yo utilicé:
Ingredientes
- 360 gramos de mantequilla
- 200 gramos de azúcar en impalpable
- 500 gramos de harina de trigo todo uso
- 3 yemas de huevo y 1 entero
- esencia o especies al gusto.
Nota: Puedes sustituir la mantequilla por margarina, se puede utilizar en ambos casos la que tiene sal. Se puede sustituir la azúcar impalpable por azúcar común, pero haciendo un extra que te explico en el paso a paso.
Preparación
- Lo primero que se debe hacer es suavizar la grasa, para que todo sea más fácil de procesar. Una vez suavizada, se agrega las esencia o especies. En el caso de la masa de la foto, yo agregue una esencia de naranja con colorante para un pedido. Se agrega el azúcar y se integra bien a la mezcla, utilizando una batidora eléctrica o un globo batidor.
- Se agregan las yemas de huevo junto con el huevo entero y se procesa mezclar muy bien. Si se ha utilizado azúcar común, se sebe batir suficiente para que los granitos de azúcar se desintegren lo mejor posible.
- Es momento de agregar la harina, se debe tamizar e integrar suavemente, con movimientos envolventes o como si se estuviera picando la mezcla. Lo idea es no amasar, lo único que se busca es que la harina se integre a la preparación.
- La masa, sin llevarla a refrigerar, se coloca en una manga pastelera con una boquilla risada de preferencia y se comienzan a colocar las galletas en una bandeja engrasada. Una vez se colocan todas las galletas, se lleva la bandeja a la nevera por 30 minutos antes de hornear.
- En el caso de las que le coloque la esencia de naranja, termine poniéndoles lluvia de colores, también se les puede colocar mermelada en el centro, maní o cualquier tipo de nuez.
- Las galletas se llevan a hornear a 180°C, por el espacio de 10 minutos o hasta que estén ligeramente doradas por el borde. A mí me gusta cocinarlas unos 15 minutos, para dejar que se doren lo suficiente porque igual no quedan duras. Si notas en la foto, las que están marroncitas se ven mejor que las blancas, la razón es por el tema de las burbujas que tenga la masa al momento de colocarla en la manga y lo hice por tema de ejercicio. Si la masa tiene muchas burbujas, cuando estas colocando la masa en la bandeja, se pierde la continuidad de la forma de la boquilla y queda con esa textura fea. Al momento de colocar la masa, puedes apretar un poco hasta que logres sacar el aire.
- Una vez listas las galletas y si quieres hacerlas aún más especial, les puedes colocar chocolate para cobertura y si las colocas en un acetato a reposar, la parte de abajo de la galleta que tiene chocolate va a quedar brillante y no se va a pegar.
Ya con esto tenemos listas las galletas danesas. Yo para las fotos aproveche que en casa hay varias latas y las coloque, pero lo cierto es que son tan buenas comerlas que es imposible almacenarlas, se acaban muy rápido. Con estas cantidades que te comparto de la receta e hice 60 galletitas de unos 10-15 gramos de masa aproximadamente.
Déjame saber en los comentarios si eres fan de estas galletas y cuáles son tus favoritas. ¡Hasta una próxima receta!
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