Hay muchísimas cosas dulces que se pueden regalar, pero siempre he pensado que hay 2 cosas que son buenas opciones para regalar un detalle sin necesidad de alguna ocasión especial: la pasta seca y las trufas. Visitar amigos y familiares y llegar con pasta seca o trufas, es un detalle especial, es dar un obsequio dulce que la persona se puede comer en cualquier momento, sin la necesidad de que comparta durante la visita. Yo lo llamo ese detalle para que las persona se lo coma todo de manera egoísta jaja.
Las trufas de chocolate se pueden preparar de muchas formas, hoy comparto una manera sencilla con ustedes. Las trufas tradicionales son como si fueran un bombón, es chocolate intenso, incluso llevan cacao en polvo por fuera ya que, si buscas que es una trufa, vas a encontrar un hongo comestible y por su forma es que se les llama a estas bolitas de chocolate trufas. Sin embargo y como sucede en todo el mundo de la gastronomía, existes diferentes variaciones de una receta y las que más me gustan a mí, son las que se preparan con cake o ponqué.
Yo soy amante de las trufas y siempre está la creencia de que, en las panaderías o pastelerías, las trufas se hacen con los postres que no se venden, se le agrega licor, esencias y chocolate y se aprovecha el material. Si bien esto en gran parte es cierto, también hay lugares que preparan las trufas con material 100% fresco y que muchas veces es aprovechando todo el sobrante que ha quedado de una decoración o algo similar. En mi caso, decidí hacer trufas porque me había sobrado ponqué y chocolate derretido de unos postres que preparé y pensé en obsequiar algunas trufas a clientes y amigos y de esa manera aprovechar el material sobrante.
Para estas trufas, se usa ponqué desmenuzado, eliminando las partes que sean muy crocantes, en caso de que sean ponqués que se pasaron de horno y se ha tostado algo la superficie. A esto se le puede agregar leche condesada, dulce de leche, chocolate derretido, ganache de chocolate o crema de mantequilla, ingredientes que sirven de pegamento para que todo quede unificado. Pero mejor vamos al paso a paso y para eso, estos son los ingredientes que yo utilice:
Ingredientes
- Ponqué en cantidad necesaria
- Chocolate con leche condensada a partes iguales y en cantidad necesaria
- Coco rallado, lluvia de chocolate, maní, chocolate derretido para decorar.
Nota: Puedes utilizar solamente leche condesada o dulce de leche, crema de mantequilla, ganache de chocolate o chocolate derretido.
Preparación
- Lo primero es tener un cake para desmenuzar o desboronar. Puedes utilizar la receta que compartí de Pastel húmedo de chocolate y con esta receta de trufas, tienes un nivel más de utilidad del pastel húmedo. La ventaja de esta receta es que es muy húmeda y aporta una textura ideal para estas trufas.
- Yo como pegamento, utilicé una mezcla de leche condensada y chocolate a partes iguales. Pero con solo utilizar leche condensada es suficientes para darle más humedad a la mezcla. Utilizar dulce de leche aporta un sabor increíble o utilizar ganache de chocolate hace que sea todavía más chocolatoso. Si necesitas guiarte con cantidades, para el tamaño de ponqué que sale en la receta del pastel húmedo, necesitas un poco más de la mitad de una lata de 398 gramos de leche condensada.
- Lo que se busca es que se forme una masa semi suave, que permita formar bolitas con las manos y que estas bolitas queden firmes y no se deformen al colocarlas en una bandeja. Un tip que ayuda a tener una masa ideal es ir agregando poco a poco el pegamento que hayas decido utilizar e ir amansando con las manos. Una vez se tenga una masa de una buena consistencia, no se agrega más pegamento.
- Una vez formada las bolitas, es momento de decorar. Puedes pasarlas por coco rallado, maní, lluvia de chocolate, lluvia de colores, cacao en polvo o sumergirlas en chocolate derretido. Todo depende de tus gustos, sin embargo, si decides utilizar chocolate derretido, recomiendo que lleves a enfriar todas las bolitas y de esa manera al momento de sumergirlas en el chocolate, se adhiere rápido y si las quieres con una acabo perfecto, puedes pinchas las bolitas con un palillo y sumergirla. Yo prefiero utilizar un tenedor y que se forme una base de chocolate para que no se rueden las trufas dentro de una caja de regalos.
Ya con esto las trufas están listas, utilizando esta técnica se pueden hacer de pie de limón, chessecake y algunas variaciones más, para que así se puedan preparar para todos los gustos de las personas. Esto es una técnica bastante sencilla, que permite aprovechar ingredientes y que particularmente me encanta hacer para regalar y consentir a esas personas que de alguna manera siempre han estado ahí apoyando.
Déjame saber en los comentarios si eres amantes de las trufas, si las has comido de esta manera y cuál es tu combinación favorita de sabores. ¡hasta una próxima receta!